Es Portitxol es una pequeña playa escondida en la costa norte de Ibiza, un lugar que pocos turistas conocen y que ofrece una experiencia única para quienes buscan relajarse y disfrutar de la naturaleza en su estado más puro.
Esta cala aislada, ubicada en el municipio de Sant Joan de Labritja, es un rincón precioso que vale la pena explorar.
Es una playa pequeña de rocas y grava que mide 80 metros de largo y 5 metros de ancho, ofreciendo un espacio íntimo y tranquilo. Como está lejos de las rutas turísticas habituales, es muy serena y pacífica.
Ubicación y cómo llegar
Es Portitxol está a 12 kilómetros de Sant Joan y a 6 kilómetros de Sant Miquel, en la zona de Sant Miquel.
Para llegar a esta cala, necesitas caminar un poco.
Primero, debes ir a la urbanización Illa Blanca. Desde Sant Miquel, toma la carretera hacia Sant Mateu y sigue recto.
Al final de la carretera, gira a la derecha hacia la urbanización Illa Blanca y sigue por 800 metros. A la derecha, verás unos contenedores de basura rodeados por un muro de piedra. Desde ahí, toma una calle que sube y baja y atraviesa una zona con casas.
Al llegar a una bifurcación, toma la calle de la derecha y sigue bajando otros 350 metros hasta encontrar una pequeña explanada donde puedes aparcar tres o cuatro coches.
Junto al muro, una flecha azul indica el camino que lleva a Es Portixol.
Este camino es estrecho pero fácil de caminar y lleva unos 20 minutos. El regreso cuesta un poco más, como media hora, así que lleva suficiente agua.
Características y servicios
Es Portitxol es una cala completamente natural, rodeada de acantilados y un bosque de pinos.
La entrada estrecha de acantilados crea una atmósfera de aislamiento y tranquilidad.
En la orilla, hay unas dos docenas de casetas varadero, que usan los pescadores locales.
No hay ningún tipo de servicio en la cala, por lo que es esencial llevar comida y agua antes de caminar hasta allí.
Actividades en Es Portitxol
La falta de servicios y el acceso a pie no asustan a los aventureros que buscan disfrutar de las actividades al aire libre.
Es Portitxol es ideal para quienes aman la pesca en la costa y la pesca submarina, así como para los aficionados al buceo, ya sea de superficie o con bombona.
Las aguas cristalinas y la naturaleza submarina hacen de esta cala un lugar perfecto para explorar el mar.
Recomendaciones para la visita
Debido a su ubicación aislada y la falta de servicios, es importante estar bien preparado antes de visitar Es Portitxol.
Lleva suficiente agua, alimentos y equipo adecuado para disfrutar de las actividades acuáticas.
Además, es aconsejable conocer bien el terreno o ir acompañado de alguien que lo conozca, ya que el camino puede ser difícil para quienes no están familiarizados con él.
Playas y calas cercanas
Si decides explorar más la zona, aquí tienes algunas playas y calas cercanas a Es Portitxol que también merecen una visita:
- Cala Benirrás: Famosa por sus impresionantes puestas de sol y su ambiente bohemio, esta playa es ideal para nadar y relajarse. A solo unos kilómetros de Sant Miquel, Cala Benirrás es conocida por sus tamboradas al atardecer.
- Cala Xarraca: Esta cala es perfecta para el buceo y el snorkel debido a sus aguas claras y vida marina vibrante. También cuenta con algunas zonas de arena y rocas.
- Cala d’en Serra: Una cala pequeña y escondida cerca de Portinatx. Esta cala tranquila es perfecta para quienes buscan escapar de las multitudes y disfrutar de un entorno natural.
- Cala de Sant Vicent: Esta playa más grande ofrece una amplia franja de arena y aguas poco profundas, ideal para familias y aquellos que prefieren un entorno más accesible con servicios.
Conclusión
Si eres un viajero aventurero dispuesto a caminar para encontrar lugares pintorescos, Es Portitxol te espera con sus aguas cristalinas y su naturaleza exuberante.
